Muchos pensamos que ya
el vóley no será lo mismo
sin tu esfuerzo y tu sonrisa
y tu espíritu de equipo.

Sin tu respeto al rival,
tu templanza y tu armonía,
tu fe para levantar
cada balón que caía.

Tu delicadeza al mirar,
tu sencillez al hablar,
sin tu entrega, sin tus ganas
de lograr cada vez más.

Sin tu cariño a la grada
que devolvía en palmadas
y gritos de «líbero, líbero»
todo lo que tú le dabas.

El vóley no será lo mismo
que como era antes de ti
porque toda esa esencia tuya
quedará después de ti

porque has dejado tu huella,
porque has dejado tu fuerza,
tu cariño, tu sonrisa,
tu fe, armonía y destreza

y el vóley de tu país
es más sensible y humano
por todo lo que dejaste
allí por donde has jugado.

Apasionante camino
el que se abre ante tus pasos
que lo vas a crear tú
con tus aciertos y fallos.

Que en cada paso que des
halles siempre algo especial
y encuentres tanto cariño
como el que dejas atrás.

Dedicado a Laura Naranjo Martín
Fotos: Laura Naranjo Líbero (en Facebook)