
Almas contrarias se alían
con tanta efectividad
que la fuerza que combinan
nadie la podrá enfrentar.
Y, de todas que la forman,
emerge la más potente
elevándose hasta el cielo
y girándose hacia el frente
para descargar su furia
contra una esfera ardiente
que volará enfurecida
destruyendo a las de enfrente.
Y, con su magna visión,
ha visualizado un hueco
que sus enemigas débiles
han dejado descubierto.
Allí desata su ira
y, tras pegar con su garra,
espera ver el impacto
que desatará las llamas.
Pero enfrente una guerrera
vigilaba la amenaza
siguiendo su trayectoria
bajo su enorme coraza.
Y, con bravura y coraje,
y espíritu imperturbable
fue corriendo hacia el lugar
donde el miedo es más palpable.
Hacia el peligro se lanza
con sus puños hacia el suelo
allí donde la corteza
se mezcla con el subsuelo
y es tan grande su osadía
y su determinación
que no se quema al lograr
impactar ese balón
que subirá como un géiser
en dirección hacia el cielo
y bajará amortiguado
para comenzar de nuevo.
Aquéllos que presenciaron
aclaman a su Nerea
pues su inverosímil vuelo
en la Tierra los conserva
y ahora será su equipo
el que, tras salvar su vida,
se convierte en amenaza
y desatará su ira.
Mientras, Nerea, ya en pie,
vuelve a activar sus instintos
porque puede que, muy pronto,
vuelva a acechar el peligro.
Dedicado a Nerea Fuentes Matías
Fotos: CV Kiele y G. Rubert
