Cuando vio a Newton tumbado
el manzano entró en acción
y entonces pidió a la tierra
que ejerciera su atracción.
Ahora es una Manzano
la que juega con sus frutos
utilizando esa ley,
sacándole todo el jugo.
Lanza al cielo la manzana,
cuando toma gravedad
la golpea con su rama
dándole velocidad.
Entonces llama a la tierra
para que ésta entre en acción
y reciba la manzana
con la máxima atracción.
Luego arranca sus raíces
y es ella quien sube al cielo
golpeando la manzana
para explotar contra el suelo.
(Dedicado a Saray Manzano)