Yo necesitaba un héroe
al igual que Bonnie Tyler
que diera todo por mí
hasta quedarse sin aire.
Despertó al oír mi grito
y se lanzó a la batalla,
tumbó monstruos y gigantes
con cuatro golpes de espada.
Sin su yelmo entró en mi alcoba
y me cogió entre sus brazos,
permitiéndome volver
adonde yo había soñado.
(Dedicado a Kenan Kodro)