Con el pañuelo anudado
vas saliendo de la iglesia
y la luz del mediodía
te recibe con su fuerza,
la pasión a flor de piel,
¿quién lleva en hombros a quién?

La banda de Lerín abre
la calle con sus compases
y tu pueblo peregrino
sigue tu divina imagen,
el coro aguarda su vez
¿quién lleva en hombros a quién?

Cuando interpretan tu jota
y regresas a tu templo,
cuando en medio del encierro
escucho un mugido y tiemblo,
mis piernas logran vencer,
¿quién lleva en hombros a quién?

Cuando en otoño o invierno
siento pena o siento miedo,
cuando el dolor aprieta
y nos puede el desaliento,
en tu altar vuelvo a creer
¿quién lleva en hombros a quién?

(Poema dedicado a la Virgen de la Asunción por sugerencia de mi abuelo Satur. Foto: José York)

¡Felices fiestas de Lerín!